La obra de Rembrandt se caracteriza por su habilidad para capturar la luz y la sombra de una manera única. Su dominio del claroscuro y su técnica de pincelada suelta le permitieron crear retratos y autorretratos que transmiten una gran profundidad emocional. Sus cuadros están llenos de vida y expresividad, capturando la esencia de sus sujetos de una manera magistral.



la ronda de noche
el retorno del hijo prodigo
la venus durmiente


Teniers se destacó por sus representaciones detalladas y realistas de escenas cotidianas y festivas, así como por su habilidad para capturar la atmósfera y el ambiente de sus composiciones. Sus pinturas de género retratan la vida de los campesinos, las tabernas y los mercados, y muestran una gran atención al detalle en la representación de las figuras y los objetos.

concierto de gatos
el fumador
vista from a grotto